Despedidas...

“Las cortas despedidas en los coches están muy bien. Sentado ahí es difícil abrazarse, especialmente si se lleva puesto el cinturón de seguridad. Así que nada de abrazos. Y en un coche hay siempre algo de qué hablar además de lo de que "nos vemos pronto" y "a ver si no pasa tanto tiempo". Unas palabras más sobre lo de no olvidarse la maleta en el asiento de atrás o en el portaequipajes y lo de "no te dejes nada".

Después, cuando la puerta ha truncado el resto de frases no pronunciadas, se puede decir adiós con la mano y pisar el acelerador sin mal sabor de boca. No hay necesidad de quedarse allí como un idiota mientras las frases adecuadas aparecen como una nube de mosquitos."

Aurora Boreal
Asa Larsson

A veces nos apetece despedirnos así, sin más florituras. ¿Depende de la persona? ¿De nosotros mismos? ¿Del momento, del lugar, de la situación? ¿Podemos despedirnos así de una persona que nos importa? ¿O es algo que nos sale con alguien al que no estamos muy unidos, o llegado el caso, hemos dejado de estarlo? ¿Siempre que lo hacemos de este modo es por que odiamos las despedidas o simplemente por el hecho de dejar de ver a esa persona cuanto antes?